“Los infames incendios en la Serranía La Macarena que durante ocho días, han consumido cerca de 220 hectáreas de vegetación, según la Unidad Nacional de Riesgo de Desastres, solo pueden ser atribuidos a la mano criminal de grupos al margen de la ley, que pretenden explotar estos territorios sembrando coca, y acabando con nuestros bosques, nuestras reservas y nuestra vida como nación ambiental, turística y sostenible”.

Así opinó la Vicepresidente Marta Lucía Ramírez, al señalar, además,  que “estos grupos ilegales pretenden además de conseguir la degradación ambiental de los territorios, obtener fraudulentamente licencias de uso y aprovechamiento, que terminan afectando de manera peligrosa una de las joyas de la naturaleza mundiales: el icónico Caño Cristales”. 

“No podemos menos que condenar la incalculable destrucción de la Serranía de la Macarena en Caño Cristales, y el Parque Nacional Natural Tinigua”, dijo.  

Señaló que la Serranía, una de las joyas de biodiversidad del país, ha perdido en los últimos años, alrededor de 1.900 hectáreas de vegetación afectando cientos de especies animales nativas debido a la deforestación y posterior quema en los últimos años; y ahora consumió más de 200 hectáreas, provocando una acelerada y grave deforestación.

“La biodiversidad del país no puede ser devastada por los intereses mezquinos de grupos de narcotraficantes, que pretenden hacerse con el uso de esa tierra”, recalcó.

Ramírez hizo un llamado a brindar todo el apoyo a los organismos de socorro y a la Fuerza Aérea Colombiana, "para que entre todos recuperemos la biodiversidad de estos territorios y no permitamos su uso para fines criminales".

“Acompañamos las peticiones hechas por el Procurador General de la Nación y solicitamos a la Fiscalía General que se delegue una comisión a fin de establecer la responsabilidad de estos incendios y de garantizar que ningún particular podrá hacer uso de dichos terrenos, hasta que no se culminen las investigaciones del caso”, concluyó.